Fallece el papa Francisco
El papa Francisco ha fallecido este lunes a los 88 años, según informó el cardenal Kevin Joseph Farrell, camarlengo del Vaticano. La Santa Sede comunicó oficialmente su muerte a las 9:52 de la mañana con una nota en la que se anunciaba que Jorge Mario Bergoglio, obispo de Roma y sumo pontífice de la Iglesia católica desde 2013, “regresó a la casa del Padre” a las 7:35 horas. El comunicado destacó su vida de servicio y su dedicación a los valores del Evangelio.
Francisco fue elegido en un momento clave para la Iglesia, tras la histórica renuncia de Benedicto XVI. Su pontificado ha estado marcado por un fuerte impulso reformista, una atención especial a las periferias sociales y geográficas, y una actitud crítica hacia los excesos del sistema económico global. Durante sus once años al frente del Vaticano, abordó temas como la pobreza, la ecología, el abuso sexual en la Iglesia y el papel de la mujer, generando tanto adhesiones como resistencias.
Nacido en Buenos Aires en 1936, hijo de inmigrantes italianos, Jorge Mario Bergoglio estudió química antes de ingresar a la Compañía de Jesús en 1958. Fue provincial de los jesuitas en Argentina durante la dictadura militar, un periodo que marcó su visión política y pastoral. Nombrado obispo auxiliar de Buenos Aires en 1992 por Juan Pablo II, y cardenal en 2001, su perfil fue creciendo hasta ser elegido Papa en 2013, convirtiéndose en el primer pontífice latinoamericano, jesuita y no europeo desde el siglo V.
El papa Francisco deja como legado una serie de encíclicas que marcaron su visión del mundo contemporáneo, como Laudato si’ (2015), centrada en la ecología; Fratelli tutti (2020), sobre la fraternidad universal; y Nos amó (2024), de tono más espiritual. También impulsó cambios en la estructura interna de la Iglesia y promovió una mayor inclusión, aunque algunos de estos procesos quedaron inconclusos.

Durante su pontificado realizó 47 viajes internacionales a 66 países, evitando en muchos casos los grandes centros de poder y priorizando regiones con situaciones de exclusión o conflicto. No visitó España, aunque mostró interés por crisis migratorias como la que afecta a Canarias.
Su figura ha sido objeto de fuertes debates tanto dentro como fuera del mundo eclesial, pero su impacto en la Iglesia del siglo XXI es innegable. En su autobiografía, publicada en enero de 2025, resumía su mensaje en una sola palabra: esperanza.