El descenso de gente y el aumento de mascarillas marcan el sexto día de confinamiento en la isla
Hoy viernes se cumple el sexto día de confinamiento en Palma, tras las medidas restrictivas por el estado de alarma. Durante estos días los residentes mallorquines se han visto obligados a cambiar sus rutinas para salvaguardar su seguridad y la del resto.
A falta de un día para alcanzar la semana completa de confinamiento, la tónica dominante sigue siendo la poca gente por la calle, la disminución del tráfico rodado y el aumento de controles y presencia policial en las calles para asegurar la correcta aplicación de las medidas decretadas por el Gobierno.
Los paseos a los perros siguen siendo la imagen más habitual y se aprecia un aumento de la gente que porta mascarilla y guantes, señal de la mayor concienciación de la sociedad con la peligrosidad del virus que ya se ha cobrado cuatro vidas en Balears.
También en los pueblos, transcurridos los días, existe una mayor implicación en el cumplimiento de las medidas de confinamiento. En los supermercados, farmacias, papelerías y el resto de comercios con permiso para permanecer abiertos, la gente sigue respetando la distancia de seguridad y utilizando guantes cuando es requerido, además de agilizar las compras.
Las principales calles y plazas de Palma, habitualmente llenas en semanas anteriores, hoy muestran una imagen desangelada, aunque somos conscientes de que es una estampa no deseada también lo somos de que es por el beneficio de todos.