Nubes, alguna lluvia y temperaturas máximas sobre los 25 grados

Así como el fin de semana pasado fue más de verano que de primavera, con máximas alrededor de los 30 grados y los cielos completamente despejados, mañana sábado y el domingo ir a la playa no será tan agradable.

Se esperan nubes en el cielo, viento (especialmente en Menorca y el levante mallorquín) y no se descarta alguna lluvia, aunque siempre será ligera y ocasional. Afinamos ahora el pronóstico para el fin de semana.

La Agencia Estatal de Meteorología prevé para mañana sábado, día 24 mayo y en las Islas Baleares, intervalos nubosos en Mallorca y Menorca, que podrían dejar caer alguna precipitación, aunque siempre será débil, ocasional y aislada. Port la tarde, en Mallorca, no se descarta que estas lluvias aumenten su intensidad y se conviertan en chubascos.

En Ibiza y Formentera, sin embargo, no se espera ninguna precipitación y el cielo se mostrará poco nuboso o, incluso, despejado.

Y quien sí marcará la jornada de mañana, especialmente en Menorca, será el viento. Soplará de moderado a fuerte desde la componente norte-noroeste, incluso con intervalos de fuerte por la tarde. De hecho, se activará el aviso amarillo de temporal marítimo hasta las siete de la tarde.

Las temperaturas se mantendrán con pocos cambios sobre las registradas hoy mismo, con mínimas alrededor de los 14 grados y las máximas sin superar los 24. Por influencia de la componente del viento, evidentemente, las temperaturas serán más altas en el poniente que en el levante de todas las islas

El domingo, día 26 de mayo, la semana acabará con cielos generalmente poco nubosos o despejados, aunque después y en el norte de Mallorca, no se descarta alguna precipitación débil por la tarde.

El viento el domingo habrá perdido su intensidad del sábado. Soplará entre flojo y moderado desde el oeste-suroeste, rolando después a sur y con brisas costeras ya por la tarde.

Y cerramos este pronóstico con las temperaturas del último día de la semana. Las mínimas nocturnas se mantendrán con pocos cambios y las máximas diurnas emprenderán un modesto ascenso en los termómetros, llegando a los 25 o, incluso, 26 grados en las horas centrales del día.

Por tanto, un fin de semana de primavera y aún no de verano.

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