No todos los españoles somos iguales ante la Ley Electoral
04 de noviembre de 2019 (16:32 h.)
Nuestra Constitución, en su capítulo segundo, donde se exponen los derechos y las libertades de las que gozamos todos los españoles, dice textualmente, en el artículo 14, que "los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer ningún tipo de discriminación por razón de nacimiento, raza, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social".
Esto no es verdad. Una vez más, nuestra Constitución de 1978 es mentirosa y la arrastramos desde hace 40 años. Todos los españoles no somos iguales. Y no lo somos, al menos, ante una ley. La Ley Electoral.
Según la provincia donde residamos oficialmente, la papeleta que introduzcamos en una urna será más, o menos, importante que la misma papeleta introducida en otro punto de España. Por esto, no todos somos iguales ante la ley.
Un votante de Soria, de Huesca o de Badajoz verán este domingo como su elección es mucho más potente que la de un barcelonés, la de un madrileño y, atención, que de la de un ciudadano español de Balears.