Palma extenderá la prohibición del alquiler turístico a todas sus modalidades para frenar la presión sobre la vivienda

El alcalde de Palma, Jaime Martínez, ha anunciado este martes que el Ayuntamiento ampliará la prohibición del alquiler turístico a todas sus modalidades en el término municipal, una medida con la que pretende contener la oferta turística y proteger el acceso a la vivienda residencial.

Actualmente, en la capital balear existen 639 viviendas con licencia legal de uso vacacional, una cifra que se mantendrá como límite. Martínez ha explicado que el objetivo es que la prohibición quede aprobada cuanto antes, previsiblemente en el próximo pleno municipal o en el siguiente, y que, por su carácter retroactivo de tres meses, no se podrán conceder nuevas licencias hasta entonces. El primer edil ha defendido que esta medida responde a la apuesta del Consistorio por la calidad del destino y la lucha contra la oferta ilegal.

Además, el Ayuntamiento prohibirá las ‘party boats’ las fiestas en barcos turísticos a partir del próximo año en el paseo Marítimo, y vetará la apertura de nuevos albergues, promoviendo la reconversión de los existentes en otras modalidades de alojamiento.

Durante la rueda de prensa, el alcalde también ha hecho balance de la temporada turística, destacando un cambio de tendencia hacia un visitante de mayor poder adquisitivo, con un incremento del gasto del 15% respecto a 2023 y una reducción de la estacionalidad.

Martínez ha subrayado que estas políticas forman parte de una estrategia integral para reposicionar Palma como destino turístico de calidad, reforzada con la nueva función de la Fundación Turismo Palma 365, que asumirá tareas de gestión y transformación además de promoción.