Huelga de controladores franceses provoca más de 30 cancelaciones en Baleares
La huelga de controladores aéreos convocada por el sindicato francés para este jueves y también mañana viernes ha provocado más de una treintena de cancelaciones de vuelos en los aeropuertos de Baleares, afectando especialmente a las conexiones con Francia.
La huelga se produce, además, en un periodo de máxima afluencia por el inicio de las vacaciones de verano, lo que ha intensificado su impacto en aeropuertos europeos.
En el aeropuerto de Ibiza también se han registrado otras 8 cancelaciones.
Las rutas más afectadas son aquellas con origen o destino en París, Marsella y Lyon, donde se han producido tanto cancelaciones como importantes retrasos.
La huelga afecta directamente a 11 aeropuertos franceses, incluidos los tres principales de París: Charles de Gaulle, Orly y Beauvais, donde se ha ordenado la cancelación del 25 % de los vuelos.
En otros puntos clave como Niza, Bastia y Calvi, la Dirección General de Aviación Civil (DGAC) ha impuesto una reducción del 50 % de las operaciones, mientras que en aeródromos como Marsella, Lyon, Montpellier, Ajaccio y Figari se ha solicitado la supresión del 30 % de los vuelos.
En respuesta a la situación, la Asociación de Líneas Aéreas (ALA) ha reclamado a la Comisión Europea que se protejan los vuelos que atraviesan el espacio aéreo francés durante las huelgas.
Por su parte, la aerolínea Ryanair ha enviado una carta a la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, exigiendo una reforma del control aéreo europeo para evitar que huelgas nacionales paralicen rutas internacionales.
Ante las posibles incidencias en las próximas horas, se recomienda a los pasajeros que verifiquen el estado de su vueloen las páginas web de Aena o de su compañía aérea.
También es importante recordar que, en caso de cancelación o retraso significativo, los pasajeros tienen derecho a compensaciones, asistencia o reembolso, según la normativa europea.
Por eso, lo que para muchos debía ser el inicio de unas vacaciones esperadas, una reunión familiar o un compromiso ineludible, se ha convertido en una jornada de incertidumbre y frustración en el aeropuerto de Palma.
Sin soluciones inmediatas y con plazas agotadas en otros vuelos, la situación se ha vuelto desesperante para muchos viajeros que permanecen varados sin información clara y con pocas opciones de reubicación.
La huelga está prevista hasta la medianoche del viernes 4 de julio, aunque los efectos podrían extenderse durante el fin de semana debido a la reorganización de las operaciones aéreas.