El IPC se mantiene en agosto en el 2,7% mientras la inflación subyacente sube al 2,4%
La inflación da un respiro en agosto. El Índice de Precios de Consumo mantiene su tasa interanual en el 2,7 por ciento, gracias a la bajada de los alimentos y al menor encarecimiento de la electricidad. Eso sí, la inflación subyacente, que excluye los productos más volátiles, repunta una décima y alcanza el 2,4 por ciento.
El Índice de Precios de Consumo se ha mantenido en agosto según los datos adelantados por el Instituto Nacional de Estadística. La estabilidad llega después de dos meses de subidas y se explica porque la caída de precios en los alimentos y el menor encarecimiento de la electricidad compensaron el efecto al alza de los carburantes.
En paralelo, la inflación subyacente que excluye energía y alimentos frescos subió una décima hasta el 2,4 por ciento, el nivel más alto desde abril y encadena dos meses consecutivos de repunte.
En términos mensuales, el IPC no registró variación respecto a julio, lo que contrasta con la caída del 0,1 por ciento del mes anterior.
Desde el Ministerio de Economía destacan que la combinación de estabilidad en los precios y subidas salariales está permitiendo a las familias recuperar poco a poco su poder adquisitivo.
El Instituto de Estadística publicará los datos definitivos de agosto el 12 de septiembre.
